Los niños hiperregalados tienen tantos juguetes y opciones que al final les es difícil mantener el interés en todos los juguetes y pueden terminar aburriéndose o mas entretenidos jugando con las cajas.
Los niños por naturaleza son juguetones, no necesitan de grandes juguetes que sean caros o muy específicos a través de su imaginación y del juego simbólico, con cualquier objeto pueden representar diferentes tipos de juego
Se aproximan las fiestas de fin de año y los regalos de mamá y papá, los de los abuelos, los tíos y las tías y los primos no sobran. Los niños y niñas acaban hiperregalados pero no “hiperjuguetones”. Como padres asociamos regalar muchos juguetes como una forma de darles amor. Diferentes estudios demuestran que algunos padres y madres intentan compensar de esta manera la falta de tiempo de calidad con sus hijos. Con frecuencia, sentimos el impulso de comprar cosas para sorprender a nuestros hijos e hijas, para ver esa cara de ¡Oh! La forma en que hemos sido educados y las campañas de publicidad refuerzan ese impulso, es así que obsequiar juguetes en exceso trae consecuencias negativas, generando sobre estimulación, finalmente, para los niños y las niñas, el mejor regalo será jugar con sus padres y tener tiempo de calidad con sus familiares.
Desventajas de hiperregalar juguetes
A continuación, les mencionare algunas desventajas de hiperregalar juguetes a los niños:
- Los niños y niñas dejan de valorar el esfuerzo. Sea en navidades o en cualquier momento del año, si piden algo y lo acaban consiguiendo todo al momento pensarán: si tengo todo lo que pido, ¿para qué me voy a esforzar?
- No ayudamos a trabajar la tolerancia a la frustración ni a la espera a nivel cerebral, debido a esa cantidad excesiva de regalos, su cerebro se sobre estimula, y no sabrá a qué regalo atender, pudiendo llegar a generar una apatía extrema ante los regalos”.
- Los niños o niñas que tienen tantos regalos no saben con qué jugar y no le hace caso luego a nada
- Disminución de su creatividad, ya que no tiene espacio para crear historias.
- Los niños están abrumados por tantos juguetes y, cuando pasa la novedad inicial, se aburren, no saben o no quieren jugar solos.
- Desarrollan menos la imaginación y no desarrollan la tolerancia a la frustración.
- Creen que todo es posible solo con pedirlo. Es más, a veces no necesitan ni pedirlo, ni desearlo y ya lo tienen.
Hiperregalos = Niños con Baja Tolerancia a la Frustración
La baja tolerancia a la frustración puede significar que a la mínima que hacen algo que no sale bien a la primera, renuncian y se rinden, les será muy difícil adquirir nuevos aprendizajes o habilidades. Los niños y niñas necesitan pequeñas dosis de frustración para inmunizarse y aprender a tolerar. Un niño o niña con baja tolerancia a la frustración será un adolescente irascible, que no soportará un no como respuesta y aprenderá que, cuanto más se enfada, más consigue lo que quiere.
Debemos educar en ser conscientes de qué tenemos y qué necesitamos. Educar en que el afecto no se mide por las cosas que te regalan. Una práctica de crianza positiva es reflexionar sobre lo que no usa o qué no necesita el niño o niña para donarlo antes de pedir cosas nuevas, por ejemplo, Con mis hijos Ana Victoria y Emmanuel, creamos una especie de catálogo, hacer una lista y sentarnos a definir qué les interesa, por qué piden algo, si realmente lo necesitan o qué harán, con ello, enseñamos el valor de merecer las cosas, de ganárselas y de esforzarse por superarse, ofrecerles criterios para esos regalos: juegos individuales, en familia o con los hermanos, juguetes didácticos, no sexistas, creativos, adecuados a cada edad.
Regla de los 4 regalos que debe tener un niño
El establecimiento de normas y reglas son muy útiles, una ellas es la famosa regla de los 4 regalos para disminuir ese gran número de regalos que los niños piden y reciben. Las familias apuestan por regalos que sean más útiles en la vida diaria y que se puedan trabajar otros valores más importantes en su educación. Veamos un listado de los regalos que serían más útiles:
- Un objeto que realmente desee de verdad, aunque sea comercial, porque la ilusión se debe seguir manteniendo y también para eso están estas fechas.
- Un regalo que pueda llevar puesto (ropa, zapatos o una mochila)
- Un regalo que potencie la lectura, ya sea un cuento o un cómic
- Un objeto que realmente necesite para su día a día.
Para terminar, acudo al sentido común y a la sensatez, basada en mi experiencia personal recomiendo juguetes que en cuanto más sencillos y manipulables sean, mejor son para su desarrollo psicológico. Además, evitar regalar pantallas, ya que estamos sobresaturados de pantallas que hacen que pensemos menos y nuestra creatividad disminuya, si puede ser algo para jugar en familia sería genial.